Mahatma Gandhi Nacido en 1869, y asesinado el 30 de enero de 1948 siempre lucho por la Paz y la Vida en su concepto de resistencia no violenta estas son algunas de sus frases.
El amor es la fuerza más humilde, pero la más poderosa de que dispone el mundo.
Imagino que sé lo que significa vivir y morir como no violento. Pero me falta demostrarlo mediante un acto perfecto.
El nacimiento y la muerte no son dos estados distintos, sino dos aspectos del mismo estado.
La alegría está en la lucha, en el esfuerzo, en el sufrimiento que supone la lucha y no en la victoria.
La causa de la libertad se convierte en una burla si el precio a pagar es la destrucción de quienes deberían disfrutar la libertad.
La enfermedad es el resultado no sólo de nuestros actos sino también de nuestros pensamientos.
El que retiene algo que no necesita es igual a un ladrón.
En cuanto alguien comprende que obedecer leyes injustas es contrario a su dignidad de hombre, ninguna tiranía puede dominarle.
Entiendo por religión, no ya un conjunto de ritos y costumbres, sino lo que está en el origen de todas las religiones, poniéndonos cara a cara con el Creador.
Con el puño cerrado no se puede intercambiar un apretón de manos.
Con mi muerte lograrán tener mi cuerpo, más no mi sumisión
El día que pueda tocar una estrella, ese día dejaré de vivir en un país tan injusto.
Estoy comprometido con la verdad, no con la consistencia.
Ganamos justicia más rápidamente si hacemos justicia a la parte contraria.
He tomado sobre mis espaldas el monopolio de mejorar sólo a una persona, y esa persona soy yo mismo, y sé cuán difícil es conseguirlo.
Imperfecto como soy, comencé con hombres y mujeres imperfectos, por un océano sin rutas.
La fuerza no proviene de la capacidad física sino de la voluntad indomable.
La humanidad no puede liberarse de la violencia más que por medio de la no violencia.
El amor es la fuerza más humilde, pero la más poderosa de que dispone el mundo.
Imagino que sé lo que significa vivir y morir como no violento. Pero me falta demostrarlo mediante un acto perfecto.
El nacimiento y la muerte no son dos estados distintos, sino dos aspectos del mismo estado.
La alegría está en la lucha, en el esfuerzo, en el sufrimiento que supone la lucha y no en la victoria.
La causa de la libertad se convierte en una burla si el precio a pagar es la destrucción de quienes deberían disfrutar la libertad.
La enfermedad es el resultado no sólo de nuestros actos sino también de nuestros pensamientos.
El que retiene algo que no necesita es igual a un ladrón.
En cuanto alguien comprende que obedecer leyes injustas es contrario a su dignidad de hombre, ninguna tiranía puede dominarle.
Entiendo por religión, no ya un conjunto de ritos y costumbres, sino lo que está en el origen de todas las religiones, poniéndonos cara a cara con el Creador.
Con el puño cerrado no se puede intercambiar un apretón de manos.
Con mi muerte lograrán tener mi cuerpo, más no mi sumisión
El día que pueda tocar una estrella, ese día dejaré de vivir en un país tan injusto.
Estoy comprometido con la verdad, no con la consistencia.
Ganamos justicia más rápidamente si hacemos justicia a la parte contraria.
He tomado sobre mis espaldas el monopolio de mejorar sólo a una persona, y esa persona soy yo mismo, y sé cuán difícil es conseguirlo.
Imperfecto como soy, comencé con hombres y mujeres imperfectos, por un océano sin rutas.
La fuerza no proviene de la capacidad física sino de la voluntad indomable.
La humanidad no puede liberarse de la violencia más que por medio de la no violencia.